En el artículo de hoy veremos la importancia de las actividades creativas desarrolladas por las personas mayores porque tienen muchos beneficios e influyen muy positivamente en elenvejecimiento activo.
El progresivo envejecimiento de la población ha provocado el desarrollo de múltiples formas de
intervención para mejorar su calidad de vida. En diversas investigaciones sobre el tema se ha demostrado que a través de estas estrategias para fomentar la creatividad se consigue paliar o frenar el deterioro cognitivo en cierta medida.
A través de estas actividades se lleva a cabo una estimulación cognitiva, además de potenciar un continuo proceso creativo, que ayuda a que las personas intenten esforzarse al máximo, adaptándose a su entorno y modelando su vida. Estas actividades pueden actuar sobre varias áreas: física, mental, afectiva y social. Todas ellas desempeñan un papel importante en el proceso de envejecimiento, y la intervención en cualquiera de ellas puede contribuir a prevenir los déficits que aparecen con la edad.
Por este motivo, en la residencia, llevamos a cabo talleres y programas centrados en la memoria, talleres de educación física o relajación, de lectura o escritura, reflexoterapia, arteterapia, musicoterapia, etc.
Los beneficios de estas terapias artísticas son:
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Explorar y adoptar nuevos roles ocupacionales
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Trabajar la confianza en uno mismo
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Expresar el propio estado de ánimo sin sentirse obligado
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Aliviar un dolor terapéutico
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Aprender mediante el ensayo-error
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Mejorar la autoestima
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Afrontar situaciones nuevas
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Ejercitar la concentración, precisión y paciencia
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Diagnosticar o detectar signos y síntomas de ciertas enfermedades
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Trabajar la memoria
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Sentirse realizado, feliz
No es necesario tener conocimientos artísticos para llevar a cabo estas actividades pues los métodos utilizados son sencillos.
Algunos ejemplos de actividades artísticas son:
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Tareas de reconocimiento a través del olfato, oído, gusto y tacto
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Manualidades
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Pintura y dibujo
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Música y teatro
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Literatura
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Danza
Esta semana queremos incluir una poesía de un residente de nuestro centro: el Sr. Enrique Mayorga, el cual nos deleita en los talleres de poesía.
Lo llamamos “Poesía en voz alta”, porque él la lee y los demás oímos… pero si nos adentramos en lo que se dibuja detrás de la simple lectura de una poesía, encontramos que se activan muchos recursos personales de nuestros residentes. Tal y como hemos comentado anteriormente se estimula la memoria, la atención, la imaginación, los sentimientos… Utilizamos este momento como una bisagra para crear un espacio de cohesión grupal con un tiempo de lectura y escucha.
Esperamos que os guste tanto y la disfrutéis como  nosotros….
¿No ves que lo tienes todo?
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Me entregaste tu amor abiertamente,
porque querías amor, sólo por eso
y yo que deseaba amor ardientemente,
me llené de tu amor con embeleso.
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Feliz me envolvía en ese amor
dándome la vida y la alegría,
cegándome no imaginé que el dolor
por mis venas poco a poco se metía
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Ese cariño tan grande llegó a ser mi sin vivir,
mientras los celos y las dudas me deprimían de tal modo
que cuando veías mi pena y el llano de mi sufrir,
me decías con ternura, ¿no ves que lo tienes todo?
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Bella frase que repite continuamente tu boca
y entre caricias y besos me haces creer que es verdad,
pero que al sentirme sólo mi mente se me desboca
suplicando tu cariño aunque sea por piedad,
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Y tu me sigues diciendo que me estás queriendo mucho,
que por qué he de tener duda si estoy en tu corazón,
 y es tan dulce y tan bonito lo que de tu boca escucho,
que mi amor sigue creciendo quitándome la razón.
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Dirige mi voluntad, mis sueños, mis pensamientos,
pero si no estás conmigo llego a sufrir de tal modo,
que espero desesperado retorne a mi ese momento
que me digas dulcemente, ¿No ves que lo tienes todo?
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Pero bien se que jamás me querrás como te quiero,
lo tuyo es ansiedad, lo mío es desespero,
yo soy para ti la luz, tú para mi mil luceros,
darías la vida por mí, pero yo por ti me muero.
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De esta forma exijo más que lo que ofrece tu amor
llegándose a confirmar lo que nunca quise ver,
que el precio de tu querer es un constante dolor
cuando tú sin mendigarlo posees todo mi ser;
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Así con esta amargura dónde no encuentro la calma
y con tanto sufrimiento me descentro de tal modo
que gritando este cariño que por ti tengo en mi alma
te dice con sentimiento, ¡Tú sí que lo tienes todo!
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E. Mayorga.