La importancia de beber aguaÂ
Por todos es sabido que nuestro organismo está compuesto principalmente por agua. Cuando somos pequeños y jóvenes contamos con una proporción del 80% de agua frente al 60% en hombres y el 50% en mujeres, cuando envejecemos. Hay diferencia, ¿verdad?
Nuestros mayores tienden a beber menos agua al notar que tienen menos sed y esto sumado a la presencia de enfermedades, el consumo de medicamentos y ciertas condiciones climáticas, puede favorecer, en muchas ocasiones, la deshidratación.
Desde el Instituto de Investigación Agua y Salud, nos dan los siguientes consejos:
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Tienen que beber de forma constante para mantener una correcta función renal, evitar el estreñimiento o mantener la temperatura corporal correcta.
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Hay que animarlos a que consuman agua y se beneficien de todos los minerales que les proporciona.
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El consumo de agua debe hacerse de forma gradual a lo largo del día: un vaso de agua en cada comida (desayuno, comida, merienda y cena) favorece la ingestión de sólidos. Y además, deben repartir 4 vasos de agua durante el resto del día.
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Las aguas termales y sus propiedades curativas 
El agua mineralizada y caliente de las ‘termas’ tiene diferentes efectos positivos en el cuerpo humano, tal y como se detalla en Geosalud como por ejemplo:
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Aumenta la temperatura del cuerpo, matando gérmenes, entre ellos virus.
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Aumenta la circulación sanguínea y la oxigenación
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Elimina toxinas del cuerpo
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Aumenta el metabolismo, ayudando a la digestión
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Un baño repetido (3-4 semanas) puede mejorar el funcionamiento del sistema nervioso y el inmunológico.
También es aconsejable para todas las personas mayores que padezcan de alguna enfermedad de la piel como psoriasis, dermatitis y enfermedades por hongos. Â En este caso, es necesario utilizar un baño propio.
Antes de utilizar la terapia con aguas termales, es recomendable siempre consultar antes a un médico, ya que nuestros mayores deben usarla con precaución, sobretodo si se toman medicamentos para enfermedades del corazón.
Gimnasia en el agua
Según un estudio hecho en la Univerdad Federal de Sao Paulo (Brasil) y publicado por la revista ‘Geriatrics Gerontologie International’ la gimnasia hecha por nuestros mayores en el agua es más efectiva que hacerla en tierra.  Se compararon dos grupos que durante 12 semanas hicieron gimnasia en el agua, y gimnasia en tierra. Tras ese tiempo los datos del peso, pulsaciones, flexibilidad y elasticidad fueron muy similares en los dos grupos, pero en el grupo que se ejercitó en el agua, se mejoró de forma considerable la capacidad cardiorespiratoria y la forma física neuromuscular. ¿Qué os parece?
El aguagym está recomendado especialmente para personas con sobrepeso, lesiones traumatológicas, problemas de movilidad y estabilidad articular en rodillas.
Como veréis no hay excusa para que nuestros mayores no se hagan grandes amigos y aliados del agua. Además de todos los beneficios que les aporta físicamente, repercute en el estado anímico. El agua da paz y tranquilidad y eso también es fundamental para animarlos poco a poco a que desarrollen estas prácticas y sobretodo se hidraten muy bien todo el año.
¿Os ha parecido interesante? Cualquier duda nos podéis escribir.
Saludos,
Equipo Residencia Fontpineda